It is what it is...
Ya no contuve mi respiración. Ya no corrí a tu lado a saludarte. Al hacerme indicación de tu presencia eche mano de mi encanto naco y comenté "Ah! Sí, ya la vi. Que chingue a su madre".
Y recorrí el resto de la velada sin recurrir a ti. Será que por fin, mi querida amante suiza, que ya no controlas el hilo de mi corazón. Se habrán acabado los sudores de manos al verte? O sera que tantos clavos terminaron por sacarte de aquí.
Ahora puedo respirar tranquilo sabiendo que por ti ya no salta mi corazón. Y quizás ni la vista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario